¿A qué edad puede hacer un niño wakeboard?

Una de las preguntas que más me hacen cuando me piden información sobre la práctica del wakeboard o del esquí náutico es a qué edad puede empezar los niños. Mi respuesta siempre es la misma, siempre les digo que depende del niño o de la niña.

Por poder, pueden empezar muy pequeñitos, pero es recomendable que sepan nadar. Aunque si saben flotar y no tienen miedo al agua, al ir con un buen chaleco, no habría problema, hay casos de niños que han aprendido a esquiar o a hacer wakeboard antes que a nadar.

Yo suelo aconsejar que empiecen con seis años, sobre todo porque se suelen manejar mejor en el agua y entienden más a razones que a impulsos. Es decir, si les explicas que no deben tener miedo, que no pasa nada, normalmente van a escucharte.  Si, por el contrario tienen 4 añitos, les pueda el miedo y cuando están en el agua a la primera dificultad se ponen a llorar y dejan de razonar, entonces se acabaría el esquí o el wakeboard durante una larga temporada.  Pero claro, es como todo, depende del niño y sobre todo de su relación con el agua.

Por otro lado si llevas a un grupito de 6 o 7 niños en el barco y hay uno más pequeñito, de 4, que quiere imitar al resto, no le prives de probar. Deja que se meta al agua, quizás haya nacido para hacer wakeboard.

Os dejo unos trucos para hacer wakeboard o esquí náutico con los más pequeños de la casa.

En el caso del esquí es importante que se aten los esquís, así no tendrán que preocuparse de que se separen. Los combos para niños suelen estar atados o enganchados pero si no lo están, ponles un tornillo en el centro d la punta, que sobresalga un poquito y atas un cordoncito que una un esquí con el otro, dejando como mucho un palmo entre ambos. Así les resultará más fácil. Esta dificultad no la encuentras en el wakeboard. Por lo que podría ser más interesante empezar con la tabla y luego enseñarles a esquiar.

Existen tablas de esquí acuático para niños que llevan directamente la cuerda a la tabla y así ellos no sienten el tirón del barco, sería comparable a ir en un trineo. El barco tira de la tabla en su totalidad no depende del agarre del niño.

Otro consejo es colocar la cuerda muy muy cortita, de tal manera que les facilitarás la salida y así tendrán menos miedo, porque pueden ir escuchándote no es como ir a 15 metros del barco.

También es conveniente que usen casco, por si al caer se dan un golpe con la misma tabla. No tiene por qué pasar, pero mejor prevenir que curar. También puedes ponerles un neopreno, los niños suelen quedarse fríos mucho antes que nosotros y ellos disfrutan un montón poniéndose y quitándose el traje porque se sienten más profesionales.

Recuerda ir muy despacito y parar siempre que ellos lo pidan.

No insistas, un día esquiarán un minuto y sin darte cuenta llegará el día que se tiren dos horas seguidas detrás del barco. Ese será el gran momento en el que te preguntarás cómo vas a pagar tanta gasolina.